TESTIMONIALES

“Las clases de Danny mezclan los tres componentes que a mí más me gustan del yoga; esfuerzo físico, concentración y meditación.

Este balance hace que las clases siempre sean un reto diferente para mí. Las clases son sumamente personalizadas a pesar de que haya grupos grandes. Danny ha logrado mantener esto en sus clases en línea. Como consecuencia, he avanzado más rápido, Danny me ayuda a poner especial atención a las posturas que representan retos físicos personales o que me pueden ayudar con ciertas lesiones. Para mí, las clases de Danny no sólo mejoran mi salud, sino que me abrazan el corazón. Por último, me encanta la música de sus clases e incluso oigo las playlists fuera de clase ¡NAMASTE!”.

— Andrea Marín, 31 años

“Tuve un problema de atrapamiento del nervio ciático en el músculo piramidal, intenté todo tipo de tratamiento: terapia muscular, quiropráctica,y acupuntura. La mejoría fue muy poca, hasta que llego Danny. El dolor se me quito por completo en menos de 8 sesiones, a partir de entonces, en cada sesión, hay una mejora. Gracias Danny, es increíble recibir tus enseñanzas.”

— Alejandro Acosta, 66 años

 

“¡Las clases de Danny son puro amor! 

Desde la clase uno Danny te hace sentir bienvenido, es admirable su paciencia y su entrega para que disfrutes la práctica y para que además conozcas y cuides a tu cuerpo. Ella no es solo es una maestra de posturas de yoga, cada una de sus clases es muestra de su pasión y compromiso para hacer del mundo un lugar mejor a través de la práctica de Yoga ¡#YogaParaTodos!Ella ha sido la más bonita inspiración para mí, sus clases y sus enseñanzas me han regalado la oportunidad de apreciar mi cuerpo, su fortaleza y todo lo que hace por mí.Sus clases además, me han ayudado a encontrar mi propósito, a soñar un poco con querer también ayudar a los demás a descubrir su verdadero ser como ella lo hizo conmigo.”

— Aiko García, 34 años

 

“Me encanta tu clase Danny, ya que conoces mis necesidades, tengo una lesión en la rodilla y cuidas mis posturas para no lesionarme. Me gusta mucho que la práctica la hagamos con música y que sea diferente cada vez.”

— Emma Ochoa, 65 años

 

“Hace un poco más de tres años que practico con Danny. Además de ser parte de mi rutina habitual de ejercicio, la clase es un placer. Las posiciones me retan a llevar a mi cuerpo a nuevos lugares y las pláticas llevan mi conciencia a descubrir nuevas explicaciones. Sumándole que hemos creado un verdadero espíritu de comunidad -a pesar de la pandemia y el encierro-, mi práctica ha enriquecido todo mi mundo: físico, emocional, social.

Tengo mejoras en mi elasticidad y fuerza; más calma y paz interior y un grupo nuevo de amigos.”

— Manuel González, 54 años

 

“Mi esposo y yo tomamos clases de yoga prenatal con Danny para ejercitarnos durante el embarazo. Las diferentes posturas que realizamos nos permitieron relajarnos y aliviar el dolor de espalda por el peso de la pancita. Nos gustaron mucho los ejercicios de respiración ya que nos ayudaron a conectarnos con nuestro cuerpo y emociones, pero principalmente con nuestra bebita.

Danny hizo que esta experiencia fuera única y especial para nosotros.”

— Yunuen Lucatero, 33 años

 

“Agradezco a la vida por hacer posible seguir con mis clases de yoga. Gracias Danny porque eres la maestra que lo hace realidad, por cuidarme en cada postura y por hacer de cada clase una experiencia especial llena de energía y con mucha paz.

Namasté.”

— Gina Ochoa, 68 años

 

“Una clase personalizada, dada con pasión y con mucho conocimiento de yoga. Una gran maestra y persona.”

— Mariana Isunza, 37 años

 

“Llevo en clases con Danny como 6 meses, haciendo yoga en forma muy enfocada a un problema muy específico que tuve hace 8 meses, la ciática. Con el yoga me he sentido cada vez mejor, es una forma de ir superando este problema y de disfrutar cada mañana que empiezo haciendo yoga con Danny.”

— Ignacio Gómez, 44 años

“Las clases de Vinyasa yoga han sido una experiencia única, ya que me han permitido relajarme y conectarme más conmigo misma.

¡Me encanta la fluidez y poder aprender más sobre los conceptos que están por detrás de esta disciplina!”

— Caro Vives, 19 años